La papa noisette es la opción perfecta para acompañar platos gourmet por su delicadeza y su sabor. Pero es tan rica, que tanto adultos como niños la piden cada vez más en el día a día.
Esta forma de cocinar la papa surgió en Francia en el siglo XI de la mano del cheff Antoine-Augustin Parmentier. Se dice que Parmentier la creo como una forma de honrar a su amada esposa.
La papa noisette se caracteriza por su pequeño tamaño y forma redondeada. Para conseguir esta forma se utilizan herramientas especiales de corte, que le dan a la papa un aspecto uniforme. Sin embargo, hay una forma de hacerlas casera, con muy pocos ingredientes y mucho, pero mucho más baratas que las compradas.
Son un clásico de la gastronomía francesa que se ha ganado un lugar en las mesas de todo el mundo por su textura crujiente por fuera y suave por dentro.
Papas, huevo, pan rallado
Pelar, lavar y hervir las papas hasta que estén cocidas. Retirarlas del fuego, pisarlas hasta hacer puré y dejar enfriar.
Agregar pimienta, una yema de huevo y mezclar bien hasta lograr una pasta homogénea y con ayuda de una cuchara, debemos ir agarrando pequeñas porciones del puré y formar bolitas.
Pasarlas por harina dándole forma redondeada, luego rebozar en huevo y por último en pan rallado.
Freír las bolita en abundante aceite bien caliente, hasta que queden doradas, retirar y escurrir.
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