El próximo martes la Justicia resolverá si Micaela Méndez es sobreseída y si Pablo Arancibia permanece detenido por el femicidio de Florencia Romano.
Este miércoles la fiscal de homicidios Claudia Ríos dio mayores detalles acerca de las pruebas que llevaron al recupero de la libertad de Micaela Méndez y al pedido de sobreseimiento, a la vez que comprometen aún más a Pablo Arancibia como el único autor del femicidio de Florencia Romano.
La fiscal se refirió a declaraciones, mensajes y fotos que atestiguan que Méndez estaba en una casa de Las Heras al momento del hecho de sangre; en tanto, mencionó el registro de diversas cámaras, el recorrido de GPS de un testigo junto con Arancibia y la huella dactilar del imputado en el auto en el que fue trasladado el cuerpo de Florencia.
Hasta el momento no se han secuestrado armas ni el celular de Florencia.
Sin embargo, todas estas pruebas llevan a la fiscal a pedir que Arancibia siga preso (tomaba una medicación, tenía una ideación suicida, lo trasladan al sauce y se lo compensa) y que Méndez recupere su libertad.
Paralelamente a la causa por femicidio, en estas últimas horas trascendió que el fiscal Jorge Calle imputó a la operadora del CEO, por los delitos de abandono de persona en contexto de violencia de género e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
En este sentido, los abogados querellantes hicieron especial hincapié es que el hilo no se corte por lo más fino, en tanto calificaron a Arancibia como un degenerado y manipulador.
Los papás de Florencia se constituyeron en querellantes y la mamá tomó la palabra. Brevemente, pero con el dolor a flor de piel, se refirió al llamado al 911 y al jefe de la policía Roberto Munives.