Los feriantes del Paseo Persa que estaba ubicado en la calle General Paz y que se incendió hace cuatro meses se manifestaron durante la noche de este lunes y madrugada de martes porque, según reclaman, no tienen un lugar donde trabajar.
Tras el incendio de los locales, algunos de los feriantes comenzaron a vender en la vereda de donde funcionaba el Persa. El tema es que ese edificio corre peligro de derrumbe, es por eso que empezaron las tareas de demolición y se estima que demorarán 90 días. Ante esto, los feriantes se manifestaron para que desde la Municipalidad ofrezcan alguna solución.
“Sólo queremos trabajar", dijo una de las feriantes.
Y agregó que "antes de las elecciones les ofrecieron una solución y que tras los comicios, las autoridades se desentendieron del conflicto". La mujer aseguró que se sienten "usados".
Ante la polémica, Lorenzo Nuevas, Secretario de Desarrollo Económico de Mendoza, dijo: "La postura del municipio desde que ocurrió el siniestro fue siempre la misma, acompañarlos y brindarle seguridad en todo momento por decisión del Intendente".
"El día después del siniestro establecimos una mesa de diálogo, eran 65 los feriantes afectados y les dimos un subsidio de 50 mil pesos para afrontar costos. Tuvieron la posibilidad de acceder a una línea de capital de trabajo y solamente 13 de 65 la pidieron, lo cual nos parece extraño", agregó.
Nuevas agregó que tras el siniestro, los feriantes le solicitaron a la Municipalidad un lugar para trabajar. "Recordemos que donde sucedió el incendio fue un lugar privado, la Municipalidad acompañó buscando lugares y organizando reuniones entre feriantes y privados. Encontramos más de cinco lugares y la mayoría fueron rechazados por los feriantes porque no llegaban a un acuerdo económico o porque no les favorecía la ubicación".
Uno de los lugares en los que sí cerraron un acuerdo fue en el Paseo de Alameda, en Córdoba y San Martín. "De los 65 feriantes, 30 se instalaron ahí. Otros se reubicaron por sus propios medios y quedan 15 feriantes por reubicar".