En estos tiempos donde el ahorro energético se ha convertido en una prioridad para muchos hogares, conocer pequeños trucos para reducir el consumo de electricidad puede hacer una gran diferencia en la factura mensual.
No solo se trata de un tema de economía, sino también de cuidar el medio ambiente y hacer un uso más eficiente de los recursos que tenemos a disposición.
Muchas veces, no somos conscientes de que algunos electrodomésticos continúan consumiendo energía incluso cuando no los estamos utilizando. Este fenómeno, conocido como consumo en stand-by o "vampiro", puede representar un porcentaje significativo de la factura de luz sin que nos demos cuenta.
Es por eso que desenchufar ciertos electrodomésticos cuando no están en uso puede convertirse en una estrategia eficaz para reducir el consumo eléctrico de manera considerable.
Aunque estén apagados, los televisores siguen consumiendo energía en modo stand-by.
Este consumo, aunque reducido, se mantiene de manera constante y puede sumar en la factura mensual.
Lo ideal es desenchufar el televisor cuando no se está utilizando o conectarlo a una extención con interruptor que podamos apagar fácilmente.
Este electrodoméstico suele estar enchufado todo el tiempo, pero lo cierto es que su reloj y panel de control siguen consumiendo electricidad, aunque no lo estemos usando.
Desenchufarlo después de cada uso puede ayudarnos a evitar ese gasto innecesario.
Es muy común dejar los cargadores enchufados después de cargar el teléfono o la tablet, pero estos siguen consumiendo energía si permanecen conectados a la corriente.
Tomar la costumbre de desenchufarlos puede resultar en un ahorro a largo plazo.
Aunque las computadoras modernas son más eficientes en términos energéticos, siguen consumiendo electricidad cuando están en modo de suspensión o simplemente apagadas, pero enchufadas.
Lo mismo ocurre con impresoras, routers y otros equipos de oficina.
Tostadoras, cafeteras y licuadoras, entre otros, también pueden representar un consumo residual de energía si permanecen enchufados.
Desconectarlos cuando no están en uso puede contribuir a la reducción del consumo eléctrico en el hogar.