En lo que de limpieza se trata, no podemos dejar de lado la heladera.
Este es un electrodoméstico fundamental que está presente en cada hogar.
Mantener la heladera limpia es clave para garantizar que los alimentos se conserven en buen estado y prevenir la proliferación de bacterias.
Sin embargo, la tarea de limpieza de la heladera puede ser tediosa y a menudo se posterga.
Te traemos varios trucos caseros para limpiarla y dejarla impecable sin esfuerzo.
Antes de comenzar la limpieza es importante vaciarla por completo para poder acceder a todas las superficies y también apagarla y desconectarla.
Si nuestra heladera se conserva bien y no se ha derramado ningún alimento cocinado podemos utilizar la mezcla de jabón, agua caliente y limón para limpiarla.
En un aerosol vertemos 1,5 litros de agua caliente, un chorrito de jabón líquido y el zumo de un limón.
Agitamos para que se mezclen bien los productos y después pulverizamos en todo el interior del frigorífico.
Pasamos una esponja o trapo para retirar los restos de suciedad que pueda tener.
Después lo desinfectamos con un paño humedecido en vinagre blanco.
Si el interior de nuestra heladera presenta manchas amarillas, restos de comida o bebidas, usamos la mezcla de 1 taza de agua muy caliente, una taza de vinagre blanco y el zumo de 1 limón.
Pulverizamos la fórmula en todo el interior. Esto incluye: paredes, techo superior, techo inferior y la cara interior de la puerta.
Una vez aplicado el producto limpiador, cerramos la heladera y dejamos que el producto actúe de 10 a 15 minutos.
El vinagre blanco va a actuar como desinfectante.
Una mezcla de vinagre y bicarbonato de sodio es un remedio casero efectivo para eliminar olores y desinfectar la heladera.
Aplicamos la mezcla sobre las superficies internas de la heladera y la dejamos actuar durante unos minutos antes de enjuagar con agua tibia.
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