Los electrodomésticos juegan un papel muy importante en nuestros hogares.
Es común que con el paso del tiempo y el uso constante, estos aparatos adquieran un tono amarillento poco atractivo.
Te traemos este truco casero muy simple y efectivo para devolverles a tus electrodomésticos su color original y renovar el aspecto de tu casa.
Lo mejor de todo es que este trucazo requiere solo unos pocos ingredientes.
- Crema oxigenada.
- Agua y detergente suave.
- Guantes de goma.
- Pincel o paño suave.
Primero nos aseguramos que los aparatos están desenchufados de la corriente.
Le hacemos una limpieza superficial con el detergente al artefacto que queremos blanquear.
Nos colocamos los guantes y rociamos la crema de agua oxigenada en las partes amarillentas.
Lo llevamos a un lugar donde reciba luz solar directa. La exposición al sol es crucial para activar el proceso de blanqueamiento. Podemos usar una ventana como filtro.
Dejamos que repose bajo el sol durante varias horas. Es recomendable revisar periódicamente el progreso del blanqueamiento para asegurarnos que esté alcanzando el nivel deseado.
Una vez que el plástico haya alcanzado el nivel de blanqueamiento deseado, lo enjuagamos con agua limpia para eliminar cualquier residuo de crema oxigenada.
Si la tonalidad o intensidad de las manchas amarillas no desaparecen, intentamos dar 1 o 2 pasadas más.
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