Es el sueño de varios argentinos: ganarse el pozo máximo de un juego de azar y convertirse en millonario de un día para otro. 

Esto parece que pensó un hombre que estaba en Bariloche y compró un cartón en la Quiniela pero olvidó que lo tenía, resultó que ganó y ahora está a pocos minutos de perder el premio de $1 millón.

La agenciera que vendió el cartón colgó un cartel: “Tiene tiempo hasta las 20 de hoy” para ver si el ganador lo ve y se acerca.

Según explicó la mujer, una persona jugó la semana pasada en el Pozo de la Quiniela y ganó $1.108.000 pero, llamativamente, no aparece para retirar el premio.

Desde el kiosco en donde se hizo la jugada avisaron que hoy a las 20 vence el plazo para pasar a cobrar.

“Esta persona jugó tres cifras -de ida y vuelta- el 24 de julio. Jugó el 593 y al 796. De casualidad, no sacó el premio mayor de $6.000.000 pero ganó $1.108.000”, explicó Elsa Sáenz Denise, propietaria del kiosco Oba Oba, en la ciudad de Bariloche.

La mujer, sorprendida ante la inminente pérdida del premio millonario, estimó que el ganador “no es un cliente habitual” de su comercio ya que allí ingresa “principalmente público local”.

No es la primera vez que Sáenz Denise pasa por este tipo de situación: “Ya nos pasó hace poco que una persona ganó 70.000 pesos de la quiniela y no los vinieron a cobrar. El otro día alguien ganó el Quini, con un premio menor, y tampoco vino a buscarlo”, dijo.

Ya en la cuenta regresiva, la mujer advirtió que el misterioso ganador “tiene hasta mañana -por hoy, viernes- a las 20 para cobrar el premio”.