Nexting: El ladrón que te roba el presente

Nexting: El ladrón que te roba el presente

La ansiedad de vivir en estado de “futuro permanente” con la consiguiente angustia de querer controlar más de lo que se puede, forma parte de este trastorno . ¿Qué consecuencias tiene esta desconexión con el presente? La mirada profesional.

Es posible que quizá, al leer esta nota, te identifiques con una tendencia nada saludable que implica el “Nexting”. Una manera de vivir que hemos naturalizado, cuyos coletazos en el cuerpo y la salud mental no se dejan esperar. “Sin prisa, pero sin pausa”, como dice el dicho, esta manera de vivir cobra con interés. ¿Pero a qué alude el término?

La palabra “nexting” es un término derivado del inglés “next”, que significa “lo siguiente”. Las personas que padecen nexting se formulan una serie de actividades y van “tildando” cuando las concretan casi de manera compulsiva, sin disfrutar plenamente de lo que hacen. Muchas veces, luego de llegar a la meta se decepcionan, como si el logro opacara la ilusión. Casi parece que fuera una forma que de estar en la vida, que muchos tienen. En un mundo complejo, competitivo, y cambiante que nos invade voraz, pareciera obligarnos a entrar casi sin querer en esta lógica…¿Cómo lograr ponernos de pie sin ser arrastrados?

Como aclara la psicóloga Beatriz Goldberg “Es una conducta compulsiva que tienen las personas para generar permanentemente proyectos hacia el futuro porque el proyecto actual que están desempeñando sienten que no es suficiente. Esto genera una insatisfacción perpetua en el individuo. Es tener pensamientos permanentemente sobre proyectos que vamos a realizar antes de hacerlos y al concretarlos no los podemos disfrutar porque ya estamos pensando en el que sigue, con lo cual estamos sintiéndonos todo el tiempo insatisfechos”.

-Uno pensaría que tener proyectos en la cabeza siempre es positivo…

Sí, por supuesto. En la vida siempre tenemos que tener proyectos viables, saludables que representan el cmbustible que necesitamos, ya sea a corto, mediano o largo plazo. Sin embargo cuando vivimos saltando de un proyecto a otro como forma de vida, la saludable deja de serlo. Estar desconectado del disfrute del camino para conseguir un propósito, y del propósito cuando lo consigo porque ya estoy pensando en el que viene…es realmente caer en una trampa mortal. No disfruto nada, entonces aparece la ansiedad. 

-¿Cómo hacemos para cortar con eso?

Por los tiempos que corren, todos vivimos un poco en modo “nexting”, pero el problema más grande radica en la cantidad y frecuencia en ese modo que podemos o no, elegur vivir. La alegrñia que tenemos que tener pasa por disfrutar el momento.Hay que conectarse con el momento, que no implica no pensar en el futuro, y tener proyectos, pero siempre disfrutando en el momento, algo que no estamos acostumbrados.

-¿Cuáles son las consecuencias de esta conducta?


Estar desarrollando un plan mientras se está pensando en el siguiente, sin disfrutar del presente, revela una ansiedad que tiene sus efectos a nivel psicológico. Claramente, las consecuencias tienen que ver con la frustración, con no poder vivir el momento presente mientras sucede; con estar permanentemente habitando un futuro que es incierto, porque nunca ocurrió y esto nos hace vivir otra realidad que no ha pasado y tampoco la que está sucediendo en el momento.

en primera instancia hay que tomar conciencia de que el nexting es un mecanismo disfuncional, que conlleva un placer inmediato al que hay que poder renunciar en pos de un mayor bienestar y satisfacción personal.

-¿Cómo afrontarlo?

 Actualmente es habitual estar en la sala de espera de un médico y “aprovechar” para mandar mensajes y resolver temas de trabajo o mirar redes sociales que incluyen publicidades de cosas que nos interesan. Y no es que ello en sí mismo sea negativo, pero al final del día quizás todos nuestros momentos de ocio fueron tomados por estas actividades, o incluso, dejamos de hacer cosas cotidianas o las realizamos con el celular en la mano (mientras seguimos con las tareas domésticas, planeamos la reunión del fin de semana con amigos y jugamos con nuestros hijos vamos explorando en el teléfono opciones para las vacaciones o de regalos para los Reyes Magos). Es de esta manera que nuestro presente se va empobreciendo y solo queda el placer de fantasear con lo que viene. Son estos comportamientos los que tendríamos que poder comenzar a limitar. Aprender a disfrutar el presente es la mejor manera de afrontar el nexting. Practicar mindfulness o atención plena, que es una doctrina en la cual se busca sentir y vivir el momento presente mientras está sucediendo, ayuda a aprender a concentrar la atención en aquello que queremos y evitar hacerlo permanentemente en pensamientos y proyectos futuros.

Es importante volver al aquí y ahora porque pensando todo el tiempo en lo que voy a realizar hace que no pueda disfrutar de lo que sí estoy llevando adelante ahora. Hay que empezar a cambiar el chip de lo micro a lo macro, vale la pena, porque el cuerpo y la mente lo terminará por agradecer.

La profesional estuvo con el equipo de Cada Día, ¡mirá la nota!