En muchos casos el crecimiento urbano de Mendoza, no se hizo de manera planificada y cientos de barriadas se constituyeron en el piedemonte mendocino. Esta situación, desde hace tiempo, es para los expertos un factor de peligrosidad para todo el Gran Mendoza.
Por ello, especialistas realizarán una evaluación para conocer las amenazas de los aluviones y no descartan tener que retirar varios asentamientos que hay en esa zona de la provincia.
En ese sentido, en las últimas décadas se verificó un importante crecimiento de la población urbana en las zonas de piedemonte mendocino, incrementando notablemente el riego aluvional.
Los expertos señalaron que los nuevos proyectos inmobiliarios, asentamientos, villas y basurales generan importantes problemas como el aumento de las superficies impermeabilizadas y la deforestación provocando que el agua de lluvia llegue a mayor velocidad a las zonas bajas del Gran Mendoza.
Esta fragilidad natural que constituye una amenaza para la población, será una vez motivo de evaluación de los especialistas quienes aseguran que la clave para evitar tragedias es mediante la prevención.