Las tormentas del viernes pasado, 26 de febrero, dejaron numerosas secuelas, la más importante fue el colapso de un puente en la Ruta Nacional 40, a la altura de Anchoris, en el límite entre Luján y Tupungato.
El lecho del arroyo bajó de nivel a raíz de la erosión del agua y, posiblemente, por secuelas de la actividad ripiera ilegal, lo que provocó que uno de los dos puentes de la Ruta 40 en ese lugar cediera.
Desde el sábado en la tarde el tránsito volvió a ser habilitado y ambos sentidos de circulación pasarán por la mano que no sufrió daños.
El ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis, estaba en Mendoza cuando sucedió el siniestro, y aseguró que Vialidad Nacional trabajará en su construcción, pero que tendrá que tener en cuenta nuevos parámetros de lluvias extraordinarias y aseguraron que tiene Prioridad 1.
El pasado 8 de febrero, otro puente de la Ruta 40 colapsó y, hasta la fecha, sigue sin ser reparado y permanece cerrado para la circulación.
Según informó Vialidad Nacional en febrero del 2020, a principios de este año el puente estaría reparado y nuevamente habilitado para el tránsito.