El Vaticano informó hoy que “el broncoespasmo no afectó a otros órganos”. No obstante, su cuadro clínico sigue siendo complejo y su pronóstico, reservado.
El Papa Francisco se recuperó de la crisis respiratoria que sufrió ayer y, según el Vaticano, “pasó una noche tranquila“. Se indicó que el broncoespasmo que experimentó no afectó a otros órganos.
Según diversas fuentes italianas, el Papa no tuvo nuevos episodios desde la crisis de ayer, en la que sufrió un broncoespasmo que provocó un agravamiento repentino de su condición respiratoria. Las autoridades vaticanas aclararon que esta situación no afectó otros órganos del cuerpo.
Ante la emergencia de ayer, Francisco fue sometido de inmediato a una broncoaspiración y recibió ventilación mecánica no invasiva, lo que permitió estabilizar sus niveles de oxígeno. Según fuentes cercanas, su respuesta al tratamiento fue positiva y mostró mejoras en los intercambios gaseosos
Después de descansar bien durante la noche, el Papa se despertó esta mañana, disfrutó de su desayuno, tomó un café y pasó tiempo leyendo los periódicos. Sin embargo, las mismas fuentes recordaron que su estado sigue siendo complejo y su pronóstico sigue siendo reservado.
La Oficina de Prensa del Vaticano también destacó que Francisco continúa descansando y sigue su recuperación en el hospital Gemelli de Roma, donde está internado desde hace 16 días.
¿Qué es un broncoespasmo?
Según la Medical News Today, un broncoespasmo ocurre cuando los músculos que recubren las vías respiratorias de los pulmones se contraen o tensan, reduciendo el flujo de aire en 15 por ciento o más.