Según las predicciones realizadas por el INDEC, la inflación de agosto alcanzaría los dos dígitos. El aumento en los precios de los alimentos se hace notar en las mesas de los hogares argentinos. La Canasta Básica Alimentaria (que marca la indigencia) aumentó un 6,3% en julio.
Ante un panorama desolador, los comedores y merenderos no dan abasto porque cada vez más gente recurre a pedir ayuda. Algunos tuvieron que cerrar, otros están desesperados pidiendo donaciones y algunos cuentan que se les "parte el alma" al tener que mirar a la gente a la cara y decirle que se terminó la comida.
Canal 9 visitó el comedor Los Milagros de Dios, en Guaymallén, para mostrar la dura realidad que viven. Hay gente que la única comida caliente que va a recibir durante el día es la que le dan en el comedor. Por eso, Roxana y Cristina no paran.
Ellas coordinaban tres merenderos, uno de los cuales lo tuvieron que cerrar porque no tenían mercadería para cocinar.
Roxana dijo: “Estamos bastante complicados con la situación de las mercaderías, recibo ayuda, pero es tanta la demanda que no nos alcanza. Estamos haciendo de 15 a 20 kilos de fideo en un lado, y entre 20 y 22 kilos en otro lado. Es impresionante”.
La mujer contó lo triste que es decirle a la gente que no les alcanza la comida y que no tiene qué ofrecerle. “Hay algunos que me dicen ‘hace tres o cuatro días que mis hijos están a té’. O me entero de abuelos que están a puro mate sin comer nada”.
“Necesito que me ayuden, por favor, que me manden mercadería para poder abrir el comedor que tuvimos que cerrar”, pidió encarecidamente.
Además, Roxana y Cristina cocinan en una olla de 15 litros y necesitan urgente una de 100 litros porque no alcanzan a cocina para todos en una tan chica. Estuvieron ahorrando para comprarla, pero sale $55 mil. “Imagínate que si no hay para comprar comida, menos para comprar una olla”, dijeron y apelaron a la solidaridad de la gente.
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