Una mujer mendocina denunció que dos rugbiers franceses la violaron después del partido con Los Pumas. La abogada de ella dijo que además le pegaron y la orinaron.
El Ministerio Público Fiscal de Mendoza imputó formalmente a los rugbiers franceses, Hugo Araudou y Oscar Alain Jegou por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos personas. Esta acción fue llevada a cabo por la fiscal subrogante Cecilia Bignert, quien lidera la Unidad Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual en Mendoza.
De ser considerados culpables, los jóvenes enfrentarían una pena de entre 8 y 20 años de prisión.
Los jugadores fueron detenidos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el lunes, después de que se emitiera la imputación. Tras su detención, fueron trasladados esposados a Mendoza el jueves, donde se encontraron con su abogado, Rafael Cúneo Libarona, quien es hermano del Ministro de Justicia de la Nación. A pesar de la gravedad de los cargos, ambos jugadores decidieron no prestar declaración ante las autoridades.
Los eventos que llevaron a las acusaciones sucedieron tras una celebración en un conocido boliche local, donde los rugbiers se encontraron con la presunta víctima. En una declaración, Jegou admitió haber tenido relaciones sexuales con la mujer, pero insistió en que fueron consensuadas, negando así las acusaciones de abuso.
El abogado defensor, Rafael Cúneo Libarona, manifestó su convicción en la inocencia de sus clientes y se ha trasladado a Mendoza para asistirlos legalmente. Por su parte, el fiscal Darío Nora ha solicitado la detención de los rugbiers bajo el cargo de “abuso sexual agravado con acceso carnal con participación de dos o más personas”, un delito que conlleva severas penas en Argentina.
La llegada de los deportistas a Mendoza se realizó bajo un estricto operativo de seguridad de la Policía Federal Argentina, garantizando su traslado seguro. Los jugadores ahora deben presentarse ante la fiscalía local para continuar con las investigaciones, mientras su defensa ha solicitado la posibilidad de detención domiciliaria, que será evaluada por el fiscal Nora.