Con esta receta vas a poder disfrutar del mejor y más rico revuelto gramajo, para el almuerzo o la cena, es un plato tradicional que nunca pasa de moda.
En tiempos de economía ajustada, encontrar recetas que sean sabrosas, nutritivas y, sobre todo, accesibles, se ha convertido en una necesidad para muchas familias.
El revuelto gramajo, un clásico de la cocina argentina, es una opción ideal para quienes buscan un almuerzo delicioso sin gastar de más.
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Con ingredientes sencillos y económicos, este plato puede adaptarse a lo que tengás en la heladera, ofreciendo siempre un resultado exquisito.
El revuelto gramajo tiene su origen en Buenos Aires y se ha convertido en un símbolo de la cocina porteña.
Este plato surgió en los bares y bodegones de la ciudad como una manera rápida y efectiva de aprovechar las sobras.
Su versatilidad y su sabor lo han mantenido vigente a lo largo de los años, siendo una opción popular tanto en hogares como en restaurantes.
La clave para un buen revuelto gramajo está en la frescura de los ingredientes y en el equilibrio de sabores.
¿Cómo preparar un riquísimo revuelto gramajo?
Vamos a necesitar
– 4 papas medianas
– 1 cebolla grande
– 200 gramos de jamón cocido
– 4 huevos
– Sal y pimienta a gusto
– Aceite para freír
– Perejil picado para decorar
El paso a paso
Pelamos las papas y las cortamos en bastones finos, tipo papas fritas. Calentamos abundante aceite en una sartén grande y las freímos hasta que estén doradas y crujientes. Retiramos y dejamos escurrir sobre papel absorbente.
En la misma sartén, retirando el exceso de aceite, sofreímos la cebolla picada en cubos pequeños hasta que esté transparente y ligeramente dorada.
Cortamos el jamón cocido en tiras o cubos, según prefieras, y lo agregamos a la sartén con la cebolla. Cocinamos por unos minutos para que los sabores se integren bien.
Incorporamos las papas fritas a la mezcla de cebolla y jamón, mezclando suavemente para no romperlas.
Batimos ligeramente los huevos en un bol con sal y pimienta. Vertí los huevos batidos sobre la mezcla en la sartén y cociná a fuego medio, revolviendo constantemente hasta que los huevos estén cocidos pero aún jugosos.
Retiramos del fuego y espolvoreamos con perejil picado.
Servimos el revuelto gramajo caliente y disfrutamos.
