Desde la versión italiana "Maria di Magdala", de 1915, dirigida por Carmine Gallone, y hasta la reciente cinta "María Magdalena", dirigida por Garth Davis, la figura de la mujer que vivió junto a Jesucristo ha trasladado al celuloide su controversial y seductora figura.
Durante Semana Santa las películas religiosas copan las pantallas de televisión y del cine y con el estreno de "María Magdalena" en la que actúan Rooney Mara, Joaquin Phoenix, Chiwetel Ejiofor, se busca cambiar la perspectiva sobre que era una prostituta, idea que se ha extendido durante siglos.
La cinta biográfica bíblica cuenta la historia de María (Mara), una joven mujer en busca de una nueva forma de vida.
María Magdalena durante un tiempo tuvo la reputación de haber sido una prostituta arrepentida, aunque en ninguno de los cuatro Evangelios en los que se menciona una docena de veces (incluso más que algunos apóstoles), se habla de ella en estos términos.
Según muchos críticos de cine, la película que se estrenó esta semana en Mendoza se convierte en historia que rompe con la tradición patriarcal del cristianismo, porque muestra el coraje de una mujer de Magdala ante su propio pensamiento.
En esta historia, es la mujer que aconseja y acompaña a Jesús hasta la cruz y a quien este escoge para dar la noticia de su resurrección.
Pero antes otras películas han retratado la vida de la mujer y retratan a este personaje bíblico tan polémico.
Protagonizada por la bellísima Maria Grazia Cucinotta, y dirigida por Raffaele Mertes y Elisabetta Marchetti, cuenta la historia de una mujer repudiada por su marido, tratada con brutalidad por los soldados romanos y que buscó siempre el amor y la redención. Fue uno de los personajes más enigmáticos y polémicos que formaron el séquito de Cristo.
María Magdalena es principalmente conocida como una pecadora que fue perdonada por Jesús, tras lo cual se convirtió en una de sus seguidoras. Esta película muestra muchas caras de este personaje bíblico, que en muchos aspectos resulta desconocido.
La actriz italiana Monica Bellucci encarnó a María Magdalena en el polémico filme de Mel Gibson sobre Jesús, que en algunos países fue censurado.
María Magdalena es uno de los personajes que más controversia ha causado en toda la historia: que si era una prostituta o una reina, y la sex symbol, Monica Bellucci, provocó un gran escándalo entre los grupos religiosos por su interpretación.
En un mundo convulsionado tras los atentados del 11 de septiembre, tres personajes cruzan sus caminos a través de la figura de Cristo. Tony, cineasta egocéntrico, dirige en Israel una película en la que encarna a Jesús.
Juliette Binoche, que interpreta a María Magdalena en el filme, inicia un proceso de búsqueda interior influida por el personaje. Y Ted, periodista con dudas religiosas, realiza un programa televisivo sobre Jesucristo en el que Tony y Marie participan.
El afamado Robert Langdon (interpretado por Tom Hanks) sin querer se ve inmiscuido en la revelación de uno de los secretos más grandes de todos: la descendencia de Jesús.
Según la trama de la película, el verdadero Santo Grial era María Magdalena, al llevar en su vientre al hijo de Jesús, fundando una dinastía que llegaría hasta los reyes europeos.
También se habla de que la Iglesia le quitó a la mujer el importante rol que tenía en los inicios de la era cristiana. La cinta causó polémica durante su estreno en 2006.