Muy ligado a la energía de la semana, este es un fin de semana que tiene dos caras. Por un lado, mentalmente hay algo que nos incómoda, algo que no nos cierra o algo que no alcanzamos a darnos cuenta qué es. Un miedo que no podemos poner en palabras. Por otra parte, tenemos el gran regalo de conectar realmente con algo especial de la vida, esos momentos que nos hacen recordar que somos parte de algo mayor.
Son días propicios para tomar conciencia de que ya está pasando lo que venías deseando desde febrero. Es el momento ideal para dejar atrás el miedo.
Confía en tu cuerpo, en las señales que te da y eso te guiará a comprender lo que no te deja avanzar.