Esta semana tenemos la posibilidad de abrazar una mayor comprensión sobre algo nuevo que se está gestando. Todo lo nuevo implica irremediablemente un final, la muerte de algo, ya sea de una época de nuestra vida o el colapso de estructuras que nos acompañaron durante mucho tiempo.
El fin de semana fuimos testigos de esa energía y entendimos que dejar atrás el pasado nos lleva a desgarrar parte de nosotros mismos. La vida tiene un curso natural, y es siempre hacia adelante.
Esta semana la Luna llena en Sagitario nos permite comprender cómo lidiar con la incertidumbre y comprender la primera ley del universo: "No te apegues a una única forma o a un único plan".
Deja que la vida te sorprenda y te guíe. ¿Cómo nos damos cuenta de eso? Las señales siempre estan en el cuerpo, lo que nos hace bien nos expande el pecho, nos dan ganas de sonreír y avanzar.