Aunque poco se las reconozca, las mujeres también cumplieron un rol fundamental en la guerra de Malvinas. Bautizadas en el libro de Alicia Panero como "Mujeres Invisibles" ayudaron a los soldados principalmente en las enfermerías.
Estas mujeres también vivieron los traumas que deja la guerra, estrés, pesadillas y tal vez, en mayor medida, el ninguneo de una sociedad que no las incluyó en los festejos hasta hace algunos años.
La mayoría fueron enfermeras e instrumentadoras quirúrgicas civiles. Sólo la Fuerza Aérea había comenzado a incorporarlas en 1980 con el rango de cabo primero. También hubo voluntarias que casi nadie recuerda y miembros de la Marina Mercante.
Estas mujeres, recibieron en el continente y en los buques transformados en hospitales a los soldados heridos, amputados, quemados y psicológicamente agobiados.
El libro de Panero repasa historias como la de Liliana Collino, la única mujer que está probado que pisó territorio isleño a bordo un Hércules C-130 en el que se transportaban contenedores y heridos, y que en 1986 pidió su baja luego de pedir en reiteradas ocasiones un ascenso que nunca llegó.
El libro de Panero se puede descargar gratis a través de este link.
En Mendoza, una historia conocida hace algunos días llenó los corazones de todos, una mujer, enfermera se reencontró con el primer soldad de Malvinas que atendió y en un sentido abrazo revivieron la historia que sucedió hace 36 años y que los tuvo como protagonistas a ambos.