El encargado del programa contra la polilla de la vid (Lobesia Botrana), Guillermo Azin, indicó que los productos que van a utilizar (Dipel y Coragen) para el proceso de fumigación aérea están avalados para realizar el proceso y son inocuos para animales y personas.
Guillermo Azin, señaló que “estos productos son parte de los tantos que están habilitados para el control de la plaga pero decidimos utilizarlos porque son específicos para esta plaga”.
Además, aclaró que está seguro que son inofensivos para organismos vivos y seres humanos “porque se han hecho pruebas” y son métodos que se utilizan en todo el mundo.
Azin subrayó además que “son productos de bajo impacto ambiental porque los campos están zonas pobladas” y admitió que “se aplicará en 110 mil hectáreas de la provincia”.
La forma aérea de colocar el fungicida es para que llegue a tiempo y forma a todos los campos, indicó Azín. Sobre las denuncias que podría afectar a personas y animales, Azin aclaró que en este caso no pasaría porque "estamos haciendo el bueno uso del producto”.
La aplicación de este fungicida fue aprobado tras una reunión mantenida por un comité técnico científico compuesto por miembros de organismos del Gobierno provincial, el INTA, Iscamen, Senasa.
En el documento firmado en esta reunión el INTA aseguró e invitó a miembros de la Facultad de Cuyo a realizar controles al método de fumigación.
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Por su parte, en San Carlos, el Concejo Deliberante prohibió esta fumigación, así que la polémica continúa.
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