No importa cuánto se repita, quemarse por la exposición solar tiene sus consecuencias, y cada año hay mayor cantidad de casos. Lo que tenés que saber en esta nota
Desde siempre lo escuchamos: “no tomes sol a horarios peligrosos”, “ponete protección solar”, “no subestimes las quemaduras”. Estas y otras miles de frases pululan en el imaginario social, y forman parte de lo que nos dicen quienes nos cuidan, y que inlcuso repetimos a otros a la hora de crear conciencia al respecto. Sin embargo y como un círculo vicioso se vuelve de manera intermitente a lo mismo cada año: más personas afectadas por exponerse al sol, con quemaduras de leves a graves.
¿Pero de qué hablamos cuando hablamos de “quemadura”? Como lo destaca la médica dermatóloga Silvia Moreno “se trata de una lesión que produce el sol por una excesiva exposición, puede incluso ser una cama solar. Esa lesión es acompañada de una respuesta inflamatoria que es el color rojo que vemos, la hinchazón o ardor que sentimos. Allí hablamos de ‘quemadura solar’. Cuando es mucho más severa aparecen ampollas, y cuando se complejiza el paciente puede llegar a tener náuseas, cefaleas e incluso descompensación con deshidratación”.
-¿Hay zonas más frágiles que otras?
Sí, el dorso de las manos y los pies, así como también el más vulnerable que puede quemarse es el ojo (como si la persona tuviese arenilla) y los labios.
-¿Qué hacemos y cuándo saber si estamos ante algo grave?
Lo primero es hidratarse aplicando geles post solares refrescantes, tomar mucha agua y no colocar ningún tipo de aceites cosméticos, sino cremas hidratantes en todo caso. Por supuesto no exponerse al otro día nuevamente al sol de nunguna manera, ya que hay que entender que si hay quemadura, hay lesión y la piel necesita ser preservada del daño ocasionado. Si no somos concientes de todo esto, no sólo puede terminar arruinando las vacaciones propias y ajenas, sino llegando a repercutir en varios casos en la salud integral del paciente. Hemos llegado a tener pacientes internados en el hospital, porque aún los más jóvenes se colocan sustancias para broncearse como el té de ruda.
-Hay fármacos que se toman por otros temas que pueden llegar a dar fotosensibilidad?
Sí totalmente, quizá la persona no se expuso tanto al sol, pero que toman antiinflamatorios o medicación para el colesterol que pueden dar fotosensibilidad.
-¿Hasta qué capa de la piel se quema con el sol?
Con la luz ultravioleta V, la capa superficial, y con A, la capa más profunda.Es fundamental entender que el antecedente de la quemadura solar en pieles edemartosas, rojas y con ampollas, si ocurre en la niñez y adolescencia predispone al cáncer de piel melanoma, cáncer de piel mñas agresivo, por espo a los niños y adolescentes tienen que concientizarse acerca de los efectos del sol, si no hay cuidado.
Cómo elegir el protector solar adecuado
Otro gran tema con la llegada del verano tiene que ver con elegir el protector solar adecuado para el tipo de piel. Se trata de un producto central con precios elevados, por lo cual hay que tomar en cuenta varias recomendaciones a la hora de la elección:
-Nivel de protección que se debe aplicar. “La exposición a rayos ultravioleta (UVA-UVB) por el efecto solar ocurren durante todo el año. En época invernal debe utilizarse un FPS30+ y en verano debe utilizarse un FPS50+.
-Período de aplicación. No debe ser mucho mayor a las dos horas para que el producto no pierda su eficacia.
-No es lo mismo el protector solar para el cuerpo que para la cara. Se debe utilizar un FPS para la cara y otro para el cuerpo, ya que el tipo de piel, la exposición y la necesidad de cada área corporal es diferente.
-Piel secas vs. piel grasa. “Si tenemos piel grasa, elegiremos protectores libres de aceites o que tengan un ‘toque seco’, mientras que si nuestra piel es más seca nos beneficiaremos de protectores que se comercialicen como ‘hidratantes’.
La profesional estuvo con el equipo de Cada Día. Mirá la nota.