Café en ayunas, ¿Beneficio o riesgo oculto?

Café en ayunas, ¿Beneficio o riesgo oculto?

Si bien el café en ayunas puede ofrecer un impulso de energía y concentración, su impacto en el organismo depende crucialmente del tipo de grano y consumo. Enterate de todo en esta nota.

Para millones de personas alrededor del mundo, la primera taza de café es un ritual innegociable, un despertador líquido que activa el cuerpo y la mente. Y para muchos, este primer sorbo se toma con el estómago vacío, desatando un debate constante sobre sus posibles beneficios y riesgos.

Si bien la ciencia ha matizado algunas creencias populares, la realidad es que consumir café en ayunas puede ser una práctica saludable para la mayoría, siempre y cuando se elija el tipo de café adecuado y se escuche al propio organismo”, explicó la licenciada en nutrición Agostina Cantó.

Beneficios y consideraciones de tu taza matutina

Tomar café apenas te levantás tiene sus adeptos por varias razones. Según Cantó, algunos de ellos serían:

  • Estímulo mental y alerta: La cafeína es un potente estimulante del sistema nervioso central. Al tomarla en ayunas, sus efectos se sienten más rápidamente, mejorando la concentración, el estado de alerta y la función cognitiva, lo cual es ideal para arrancar el día con lucidez.
  • Aceleración del metabolismo: La cafeína puede incrementar la tasa metabólica basal en un pequeño porcentaje (entre 3% y 11% en algunos estudios), lo que potencialmente ayuda a quemar calorías más rápido. Sin embargo, no debe verse como una solución mágica para la pérdida de peso.
  • Mejora del rendimiento deportivo: Consumir café antes del ejercicio puede aumentar la resistencia y la capacidad física, siendo un aliado para quienes practican deporte a primera hora.
  • Aporte de antioxidantes: El café es una fuente rica en antioxidantes y polifenoles que combaten la inflamación y pueden proteger contra enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares y hepáticas.

Tener en cuenta sus contras, según el caso

Sin embargo, no todo es color de rosa para todos. Algunas personas pueden experimentar molestias al consumir café en ayunas:

  • Acidez y reflujo: Al ser una bebida ácida, puede agravar los síntomas de acidez estomacal o reflujo gastroesofágico en individuos sensibles. La cafeína también estimula la producción de ácido estomacal.
  • Ansiedad y nerviosismo: En ayunas, la cafeína entra más rápido al torrente sanguíneo, lo que podría intensificar sus efectos estimulantes y provocar picos de ansiedad, nerviosismo o taquicardias en personas predispuestas.
  • Alteración del cortisol: Aunque el cortisol es necesario, algunos estudios sugieren que la cafeína puede potenciar su secreción, especialmente cuando ya está naturalmente alto al despertar, lo que podría influir en su regulación a largo plazo.

Si experimentas estas molestias, considera esperar al menos una hora y media después de despertar para tu primera taza o acompañarla con un pequeño bocado.

La clave: café puro y de calidad, sin torrar

La verdadera diferencia en los efectos del café radica en su pureza. En el mercado argentino, es crucial entender la distinción entre café tostado natural y café torrado :

  • Café tostado natural (puro): Este es el café ideal. El grano se tuesta solo con calor, sin ningún tipo de aditivo. Este proceso resalta sus sabores y aromas naturales, conservando sus antioxidantes y propiedades intrínsecas. Es el café de mejor calidad y el más saludable.
  • Café torrado: ¡Atención con este! Durante el proceso de tueste, se le añade azúcar (hasta un 15-20% del peso del grano). Este azúcar se carameliza y quema, creando una capa brillante y oscura que enmascara los defectos de granos de baja calidad. El resultado es un café con un sabor más uniforme, fuerte y, a menudo, muy amargo, con notas a “quemado” o caramelo. Además, agrega calorías innecesarias y desnaturaliza el auténtico sabor del café. Es el tipo de café a evitar si buscás beneficios para la salud y una experiencia sensorial pura.

¿Cómo identificar un café puro al comprar?

  • Lea la etiqueta: Busque la frase “Café 100% Tostado Natural” o “Puro Café Tostado”. Evite las etiquetas que mencionen “torrado”, “mezcla”, “torrefacto” o “con azúcar”.
  • Observá el grano o el molido: El café puro tostado natural tiene un color marrón intenso y homogéneo. Si es en grano, no debería tener un brillo excesivo o un aspecto “acaramelado”. Si es molido, el polvo debe ser uniforme.
  • Aroma: El café puro tiene un aroma complejo y rico, característico del grano. El torrado a menudo huele más a quemado oa caramelo.
  • Al preparar: Si al agregarle leche, el café tiñe la leche de un color muy oscuro y deja un sabor excesivamente amargo sin agregar azúcar, es probable que sea torrado. El café puro natural tiende a dejar la leche más clara y su sabor es más matizado.

“Optar por café puro en grano (para molerlo en casa justo antes de usarlo) o molido de alta calidad es la mejor manera de asegurar que estás consumiendo una bebida rica en antioxidantes y libre de azúcares ocultos. Marcas que se especializan en café de especialidad o las que etiquetan claramente “100% tostado natural” son una buena opción”, aconsejó la profesional.

En definitiva, tu taza de café matutina puede ser un gran aliado para empezar el día con energía y beneficios para la salud. La clave reside en la elección: priorizará siempre el café puro, natural y de calidad, y aprenderá a escuchar las señales de su cuerpo para adaptar este ritual a sus necesidades.

La nutricionista estuvo en Cada Tarde, mirá la nota