Una mujer de 27 años eligió incluir en su Instagram los cadáveres de los animales que asesina.
Nikki Tate, residente de la ciudad de Dallas, Estados Unidos, defendió su actitud y en diálogo con Daily Mail relató que hasta recibió amenazas de muerte por su estilo de vida.
Nikki ha matado a coyotes, cerdos, ciervos, patos, gansos y palomas en sus cazas. Ella realiza su actividad con su marido y con un grupo de novias que prefieren cazar antes que ir al brunch.
Nikki pidió que respeten sus creencias y aseguró que la mayoría de los animales que cazan luego los despellejan y se los comen.
"Mi esposo y yo lo despellejamos todo, y si no podemos comer todo, lo donamos a organizaciones que tienen como objetivo alimentar a las personas sin hogar”, aseguró.
Y defendió su actividad: “La caza ayuda a mantener las poblaciones de animales en niveles compatibles. Por ejemplo, los cerdos están increíblemente sobrepoblados y pueden causar daños graves a productos agrícolas y a la vegetación, lo que puede dañar al ganado. También buscamos coyotes y gatos monteses para el control de depredadores”.