Los fuegos de A las Brasas se enciendieron en el corazón de la Ciudad de Mendoza, en Alem y San Juan.
Nico y todo su equipo visitaron a los médicos y enfermeros que trabajan en la Guardia del Hospital Central, uno de los centros asistenciales más grandes del Oeste argentino, en donde miles de historias se cruzan a diario.
Este fue un humilde homenaje a quienes hacen de su vocación una pasión por aliviar el sufrimiento humano, su vocación.
El menú de esta ocasión fue chorizos a la pomarola, matambre trenzado de cerdo y hash brown de papas (tortillitas de papa) y pollo frito apanado en semillas.