Comúnmente se cree que la rutina, la falta de sexo o la monotonía en la cama pueden conducir a una infidelidad. Sin embargo, un sondeo desmiente estas creencias.
La encuesta realizada por Second Love, una red social de personas comprometidas que quieren tener una relación paralela, consultó de forma anónima a los varones casados más activos de la plataforma.
Los resultados mostraron que el mayor porcentaje comete una infidelidad por diversos motivos que no están relacionados exclusivamente con el sexo, sino que lo hacen porque se sienten menospreciados por sus esposas. De hecho, sólo el 8% de ellos respondió que cometió una infidelidad porque se sintió atraído por alguien más.
La rutina y el constante cansancio que generan las obligaciones de la familia y del matrimonio hace que la mujer olvide la importancia que tiene su marido en su vida, según se expresa en un comunicado de Second Love. Sentirse importante y considerado por otra persona no es sólo una necesidad femenina sino también son ellos quienes lo necesitan.
“Al principio en la relación, estábamos siempre interesados por lo que le pasaba a cada uno, sé que es difícil que eso se mantenga de por vida, pero siento que ya no soy su prioridad”; “me gustaría que me considere más”; “necesito que vuelva a demostrarme que soy lo más en su vida”, declararon varios hombres que aseguraron haber sido infieles sólo “para sentirse importante para otra persona”.
Las crisis económicas generan que el hombre, tradicionalmente considerado el macho proveedor, se sienta amenazado y su autoestima se vea considerablemente afectada. Algunos comentaron: “cuando estuvimos mal económicamente, sentí que en vez de apoyarme me hundía”; “busqué a otras mujeres porque mientras era infiel me escapaba de la difícil situación que estaba viviendo ya que esas mujeres no conocían mi realidad, en cambio mi mujer me hacía reclamos constantemente”.
“Mi mujer da por sentado que la engaño todo el tiempo, me acusa sin motivos”. “Ella tuvo malas experiencias y desde la fiesta de casamiento que se ha vuelto una tortura acusándome de infiel”. De acuerdo con el sondeo, acusar al hombre falsamente puede llevar a que comentan una infidelidad sin haberlo planeado, por lo que es mejor sentarse a hablar y plantear cuales son los miedos en la pareja.
A la mayoría de los hombres les cuesta identificar cuáles son sus necesidades, pero más les cuesta expresarlas, por eso caen en buscar una relación paralela como una escapatoria. Mientras más les cuesta hablar de sus sentimientos, más propensos son a la infidelidad.
“En los momentos de mayor estrés, caigo en el pensamiento de tener una aventura”. El ritmo de vida actual, las obligaciones y el nerviosismo diario hacen que el hombre prefiera escaparse de su realidad y caiga inevitablemente en un affaire para evadir la rutina atareada.
En este contexto, Matias Lamouret, vocero de Second Love, expresó que “a lo largo de los años se creyó que el hombre es infiel únicamente por una cuestión sexual pero estas revelaciones demuestran que hay cuestiones sentimentales que generan un quiebre en las relaciones y conllevan a buscar una escapatoria”.