Adultos que vuelven a vivir con sus padres, panorama creciente

Adultos que vuelven a vivir con sus padres, panorama creciente

El fenómeno de los adultos que vuelven a residir con sus padres es cada vez más común en la sociedad contemporánea. En esta nota la opinión profesional respecto a la causas y su impacto en la nueva esfera familiar.

En los últimos años hemos sido testigos de un cambio notable en las estructuras familiares tradicionales, particularmente en lo que respecta a la convivencia entre padres e hijos adultos. La decisión de regresar al hogar parental, una vez que se ha alcanzado la independencia económica y social, plantea una serie de interrogantes psicológicos y emocionales tanto para los adultos como para sus padres.

Como apunta la psicóloga Noelia Centeno ” las razones detrás de este fenómeno son diversas y abarcan desde dificultades económicas hasta cambios en el estilo de vida y cuestiones relacionadas con la salud mental. La inestabilidad económica, como la dificultad para encontrar empleo o costos de vivienda prohibitivos, es una causa comúnmente citada. Además, factores como la búsqueda de apoyo emocional durante períodos de transición, como después de una ruptura sentimental o la pérdida de empleo, también juegan un papel significativo”.

-¿Qué otros aspectos se suman?

Otro aspecto a considerar es el cambio cultural hacia una mayor valoración de las relaciones familiares y el apoyo mutuo entre generaciones. Esto puede influir en la percepción de volver al hogar como una decisión pragmática y, en algunos casos, deseable desde el punto de vista emocional.

-¿Cómo adaptarse a ese nuevo cuadro de situación?

La convivencia entre adultos que regresan y sus padres plantea desafíos únicos que requieren ajustes tanto por parte de los hijos como de los padres. Para los adultos jóvenes, puede ser difícil manejar la sensación de regresión y la pérdida de independencia percibida. Sentimientos de vergüenza o fracaso pueden surgir, especialmente cuando se compara con los logros de sus pares que han logrado mantenerse independientes.

Por otro lado, los padres pueden experimentar una mezcla de emociones que van desde el orgullo por poder brindar apoyo hasta la preocupación por la capacidad de sus hijos para volver a establecerse por sí mismos. La dinámica familiar puede reconfigurarse, con roles y expectativas que necesitan ser renegociados para acomodar la nueva situación.

Impacto en la salud mental y el bienestar

“Desde el punto de vista psicológico, el regreso al hogar parental puede ser tanto una experiencia de apoyo como de estrés. Los estudios sugieren que, si bien puede proporcionar una red de seguridad emocional y financiera, también puede aumentar el estrés relacionado con la autonomía y la autoestima. Es crucial que tanto los adultos como sus padres practiquen una comunicación abierta y establezcan límites saludables para mantener una convivencia armoniosa”, sugirió la profesional.

En última instancia, el regreso al hogar parental plantea importantes cuestiones sobre la evolución de las relaciones familiares en el siglo XXI. A medida que las circunstancias económicas y sociales continúan cambiando, es probable que este fenómeno persista y evolucione. Comprender las motivaciones detrás de esta decisión y abordar los desafíos psicológicos asociados son pasos cruciales, para facilitar transiciones exitosas y promover el bienestar familiar.

La profesional estuvo en Cada Día, mirá la nota