Para quienes no están planeando irse de vacaciones ni son socios de clubes, las piletas en los patios de las casas son una gran opción para refrescarse.
Mendoza enfrenta un anticipo de lo que será un verano intenso en cuanto a temperaturas se refiere. El termómetro ya marcó a mediados de noviembre 38 grados centígrados y prometen ser mucho más altas en pleno verano. Según especialistas, el cambio climático está intensificando las olas de calor aumentando los días agobiantes. Las recomendaciones apuntan a evitar la exposición prolongada al sol y mantenerse hidratado y en lugares frescos.
Para muchas familias, las opciones para combatir el calor desde casa son las únicas posibles. En este contexto, las piletas de lona son una alternativa económica frente a los clubes o las vacaciones fuera de la provincia. Estas piletas permiten disfrutar del agua sin necesidad de grandes desplazamientos o inversiones, convirtiéndose en una solución práctica para los hogares mendocinos.
Con pronósticos que anticipan semanas aún más calurosas, el desafío para este verano será garantizar el acceso a espacios de recreación y alivio frente a las altas temperaturas.
Hay piletas para todos los gustos, pero por ejemplo se consigue una redonda de 950 litros a $23.174. Esta es una opción que se consigue en un supermercado que tiene una sucursal en la calle Valentín Alsina de Dorrego y otra en la Panamericana. Se puede abonar en hasta 18 cuotas de $1.287. Para tener una noción en la cantidad de litros de agua, una pileta rectangular de 1000 litros mide 1.85m de largo x 1.45m de ancho.
Desde ese precio empiezan a subir y hay hasta de casi $500.000 dependiendo de los modelos y los tamaños.