Las Abuelas de Plaza de Mayo brindaron una conferencia de prensa y contaron como fue la recuperación del nieto 138, hijo de Marta Enriqueta Pourtalé y Juan Carlos Villamayor, nacido en diciembre de 1976.
En un emotivo anuncio, las Abuelas de Plaza de Mayo informaron sobre la recuperación del nieto número 138. En una conferencia de prensa en la Casa por la Identidad del Espacio, Memoria y Derechos Humanos, ex ESMA, comunicaron que se trata del hijo de Marta Enriqueta Pourtalé y Juan Carlos Villamayor, nacido en diciembre de 1976.
A través de su cuenta oficial en X, la organización comunicó el hallazgo de un nuevo nieto, hijo de desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar, quien había sido apropiado por los militares. “¡Encontramos un nuevo nieto!”, celebraron en las redes sociales.
En la conferencia de prensa, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, anunció la restitución del nieto 138, hijo de Marta Enriqueta Pourtalé y Juan Carlos Villamayor, ambos militantes de Montoneros y desaparecidos en 1976.
Ambos se conocieron cuando tenían 17 años, ella era mayor que él y en aquel momento tenía ya tenía un hijo, Diego Antonio, con una pareja anterior. Cuando Juan Carlos cumplió los 21 años, le dio a Diego su apellido.
“El 10 de diciembre de 1976, la pareja fue secuestrada en su domicilio de la Ciudad de Buenos Aires, en un operativo perpetrado por personas vestidas de civil. Ella estaba embarazada de ocho meses y medio. La pareja fue vista en el centro clandestino de detención ESMA, que funcionó en este predio, donde posiblemente se haya producido el nacimiento del nieto 138. Hasta el momento se tienen contabilizados más de 30 nacimientos en este Centro Clandestino. Sus padres pensaban llamar Soledad o Manuel al bebé que esperaban”, indicaron en el comunicado.
La búsqueda del Nieto 138
Luego de la detención de la pareja en 1976, la familia comenzó a buscarlos en cárceles, con amparos en la justicia, pero no tuvieron resultados. “María del Carmen Villamayor, hermana de Juan Carlos, y su madre, Carmen Antonia Morinigo, emprendieron el recorrido que también debieron atravesar cientos de familiares: presentaron hábeas corpus, visitaron tribunales y cárceles, sin éxito”.
Luego de eso, recién en 1979, la madre del joven desaparecido logró presentar la denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que en aquel año una comisión se encontraban en el país recogiendo información sobre las violaciones a los derechos cometidas durante la dictadura. Carmen, de puño y letra, escribió: “En la carta que les entregué personalmente en septiembre pasado denuncié la desaparición de mi hijo Juan Carlos Villamayor y de mi nuera Marta Enriqueta Pourtalé (…) Ella en el momento que desapareció estaba embarazada de ocho meses y medio por lo cual queremos saber, como imaginará, qué fue del bebé”.
Por el lado materno, el tío Pedro Pourtalé fue quien recibió un llamado de la Comisaría de Villa Ballester para buscar a un menor de cuatro años. Se trataba de Diego, el otro hijo de la pareja que había sido dejado ahí y que años más tarde denunció el caso de Marta y Juan Carlos ante la CONADEP.
“Nieto”:
Porque Abuelas de Plaza de Mayo anunció el encuentro del nieto 138 pic.twitter.com/JCKHdIqX6e— ¿Por qué es tendencia? (@porquetendencia) December 27, 2024
“Las Abuelas, en 1988, habían presentado una denuncia que hablaba de un niño que podría ser hijo de desaparecidos. Desde 1999 la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CoNaDI) trabajó en la investigación del grupo familiar Villamayor-Pourtalé para que, a partir de esa reconstrucción, el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) fuera incorporando las muestras biológicas de la familia. Por otro lado, un joven que fue convocado por la justicia dio su muestra de ADN, que fue ingresada al BNDG en el marco de la causa 188/2000 impulsada por Abuelas de Plaza de Mayo”, indicaron desde Abuelas de Plaza de Mayo.
Y agregaron que “Luego, el BNDG fue cotejando todos los perfiles. A su vez, la Unidad Especial de Investigación de CoNaDI, y la Unidad Especializada para casos de apropiación fueron aportando datos relevantes al juzgado a cargo de la jueza María Romilda Servini de Cubría”. Ante eso, el joven fue citado a realizarse el estudio de ADN. Ayer, el Juez Daniel Rafecas informó al nieto 138 los resultados, que era hijo de desaparecidos.