Este lunes se cumple una semana del trasplante de corazón de Martiniano Grasso. El niño de 13 años evoluciona favorablemente en el Hospital Italiano de Buenos Aires.
El paciente con hemofilia recibió su nuevo corazón el 25 de noviembre, salió de terapia intensiva y está en terapia intermedia.
Está despierto, de buen ánimo, sin respirador artificial y evoluciona favorablemente. Le están haciendo el tratamiento antirechazo como es habitual en las personas que reciben órganos. El mendocino sufrió una miocarditis que se le complicó y su corazón se afectó con una lesión irreversible. Estuvo 38 días en la lista de espera nacional de donación de órganos.
El doctor que operó a Martiniano en Buenos Aires es mendocino. Ya ha operado a 5 mil chicos pero asegura que este caso marcó un antes y un después.
Jorge Barreta (Matrícula 98217) es cirujano cardiovascular infantil. Es mendocino pero vive en Buenos Aires desde el año 98. Es jefe de equipo de Trasplante Cardíaco Infantil del Hospital Italiano. Tiene 49 años, está casado y tiene dos hijos, Agustín y Josefina. La muerte de su mamá en un quirófano lo motivó a estudiar medicina de joven.
Hace una semana se convirtió en el tercer médico del mundo en lograr un trasplante de corazón en un paciente con hemofilia. Fue cuando operó a Martiniano Grasso el 25 de noviembre. Era de madrugada, la cirugía duró cinco horas y se considera una hazaña en el mundo de la Medicina.
Si bien su trabajo se concentra en la actividad privada y en buenos aires, él se hace tiempo para colaborar con el hospital público Humberto Notti. Viene a operar una vez por mes. Pero además, tiene intenciones de que la provincia crezca y mejore sus equipos para poder realizar a futuro operaciones de alta complejidad. En febrero del año que viene brindará un taller de simulación de corazón y pulmón artificial para profesionales mendocinos. Acercar el Notti al italiano de buenos aires, es su objetivo.
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