Con la llegada de épocas frías, es fundamental conocer las medidas de prevención para evitar accidentes e intoxicaciones con monóxido de carbono. Controlar los artefactos para calefaccionar y ventilar los ambientes son las principales recomendaciones para evitar que este tipo de hechos no ocurran.
El primero ocurrió en el departamento de Las Heras. Un llamado al 911 alertó sobre un incendio en una vivienda de calle Lavalle de la localidad del Algarrobal. Al lugar arribaron bomberos y personal policial que lograron rescatar a la víctima, pero lamentablemente ya era demasiado tarde, puesto que cuando le practicaron maniobras de resucitación, el hombre no respondió.
El otro hecho ocurrió también en el departamento de Las Heras, pero sobre calle Lisandro Moyano. El hecho se produjo durante la madrugada de este viernes cuando todos descansaban en la vivienda calefaccionándose con el horno de una cocina a gas. En esta oportunidad la familia se salvó de milagro, ya que uno de los jóvenes logró levantarse a tiempo con algunos síntomas de intoxicación y alcanzó a dar aviso a la policía.
Todos fueron llevados al hospital Carrillo y derivados para su posterior control. En estas horas todos se encuentran fuera de peligro.
El monóxido de carbono es un gas altamente nocivo que puede afectar la salud de personas de todas las edades. Se produce a raíz de una mala combustión al encender estufas, hornallas u otros artefactos utilizados principalmente para calefaccionar hogares o espacios cerrados, en especial si están mal ventilados. No tiene olor, color, sabor ni causa irritación en ojos ni nariz, por lo que muchas veces no se percibe su presencia.
Ingresa al organismo a través de la respiración. Al llegar a los pulmones, se propaga por el torrente sanguíneo dificultando la capacidad de transportar oxígeno, lo que afecta tanto al corazón como al cerebro de las personas y causa graves intoxicaciones e incluso la muerte.
La absorción del monóxido de carbono y los síntomas resultantes dependen directamente de la concentración en el aire respirado, el tiempo de exposición y el grado de actividad de la persona.
El monóxido de carbono provoca dos tipos de intoxicación: la aguda, provocada por altas concentraciones, es mortal y no produce síntomas de advertencia significativa.
Y la crónica, que produce:
Ante la sospecha de intoxicación por monóxido de carbono, retire a los afectados del ambiente contaminado hasta un lugar donde puedan respirar aire limpio y fresco, además de llamar al médico de inmediato.
Si es posible, procure abrir puertas y ventanas, así como apagar la fuente emisora de monóxido de carbono.