Vecinos y ambientalista de San Carlos se concentraron en el Concejo Deliberante para reclamar por las pulverizaciones. Las fumigaciones sorprendieron a los ciudadanos del departamento del Valle de Uco porque en esa ciudad se proclamó una ordenanza que prohíbe esa técnica en el departamento.
En esta oportunidad, las pulverizaciones del Iscamen se llevaron a cabo en la zona de El Cepillo y Altamira. Ante esta actitud del Ejecutivo provincial, desde el Concejo Deliberante aseguraron que iniciarán acciones legales.
La Asamblea por la Soberanía Alimentaria, para analizar la toxicidad del veneno que está utilizando el Iscamen en las fumigaciones, realizó un muestreo en el agua de las zonas donde se está realizando el proceso.
Los profesionales de la asamblea enviaron las muestras al departamento de Química de la Universidad de La Plata y comprobaron que en las zonas donde se realiza la fumigación el agua tiene más Clorantraniliprol que el recomendado en Europa.
El muestreo correspondió a aguas que se utilizan para riego y consumo humano.
Una de las conclusiones de la Universidad fue la siguiente: “Al no contar con niveles guías para aguas de consumo que regulen este compuesto en Argentina se recomienda considerar los valores regulados para la Comunidad Europea de 100 nanogramos/litro, con lo que las muestras correspondientes a los Puntos 2, 4 y 5 excederían este valor regulatorio”.
Los puntos 2, 4 y 5 que cita el informe de la Universidad de La Plata, corresponden a muestreos de aguas en campos de zonas que fueron afectadas por la fumigación.
La misma asamblea por la Soberanía Alimentaria elevó una solicitud de firmas, a través de una página web, para que el Iscamen cancele las fumigaciones.
El texto, para pedir que paren con estas prácticas se basa en: