El insólito episodio sucedió durante un operativo de Gendarmería Nacional que, luego de un año de investigación, había logrado dar con el cargamento de droga y la aeronave de una banda narco que traslada sustancias desde Paraguay a Argentina en avioneta.
Con un gran despliegue de fuerzas de seguridad se logró capturar el avión, pero no al piloto que escapó en remis. El sujeto aterrizó primero en San Antonio de Areco, provincia de Buenos Aires, donde fue descargada la droga, pero al detectar la presencia de las fuerzas de seguridad se dio a la fuga en medio de los tiros de los gendarmes.
Poco después, dejó la aeronave abandonada en un campo del partido vecino de San Andrés de Giles, ya que no pudo reabastecerse de combustible.
Los vecinos de la zona creyeron que el piloto había sufrido un accidente, y sin saber que se trataba de un criminal, lo acercaron a la ciudad y el hombre, con acento brasilero, se tomó un remis y logró escapar.
Más tarde, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, se mostró confiada en poder detener al piloto prófugo: "estamos todos en la búsqueda". Las fuerzas de seguridad lograron detener a seis miembros de la banda, cinco paraguayos y un argentino. Además, se incautó 450 kilogramos de marihuana.
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