Jaiden Rogers, del estado de Colorado, Estados Unidos, es un niño que sufre una de las enfermedades más inusuales del mundo: el síndrome de piel rígida, una patología que está convirtiendo su piel en piedra.
El pequeño ha tenido un vida muy difícil: hijo de una madre soltera que no podía mantenerlo, los Rogers decidieron adoptarlo, volviéndose sus tutores legales en 2005, le enseñaron a hablar correctamente, ya que desde temprana edad se le descubrió que era autista.
Pero las cosas se complicaron aún más hace 6 años, cuando el papá, Tim Rogers, notó que Jaiden tenía un pequeño bulto en el muslo, justo debajo de la piel.
Consultaron a un dermatólogo, pero el tumor seguía creciendo. En pocas semanass, se había extendido alrededor del muslo derecho de Jaiden y detrás de su rodilla. Una vez que las calcificaciones duras invadieron la articulación, Jaiden comenzó a perder movilidad.
Así se llegó al diagnóstico: síndrome de piel rígida. Esta enfermedad fue descubierto por primera vez en los años ´60. La piel de los pacientes comienza a espesarse y endurecerse, extendiéndose por todo el cuerpo. El de Jaiden es el caso número 41 que se ha registrado en todo el mundo.
Los papás de Jaiden ya llevan gastados 677 mil dólares del fondo de retiro de Tim, e hipotecaron su vivienda 3 veces para poder hacer frente a los gastos médicos. Los fuertes medicamentos para el dolor hacen que el niño duerma hasta 18 horas por día.
La pareja abrió una pagina de Go Fund Me para recibir donaciones y seguir el tratamiento de su hijo.