Esta es una historia de amor bastante frustrante. La verdadera identidad de los protagonistas no se ha difundido, pero sí la angustia que padecen. Ella es italiana y se vino a la Argentina por un hombre, pero al llegar acá, él le dijo que la quiere solo como amiga.
Esta relación comenzó hace cinco años. Ella estaba en Italia, casada, pero no la unía un vínculo de amor a su marido, sino solo un techo y los papeles. Se abrió una cuenta en Tinder y conoció a un argentino que justo estaba de viaje en Europa. Inmediatamente conectaron mediante la virtualidad, pero no alcanzaron a conocerse.
Él se vino a la Argentina y la relación continuó por mensajes y llamadas. Hace más de un año ella decidió jugarse todo por amor, dejar Italia e instalarse en nuestro país.
“Hace más de un año tomé la decisión de venir. Sabía lo que dejaba en Italia: una familia casi desesperada por mi ausencia, una madre grande y un hombre con quien convivo, aunque estemos separados”, contó a TN.
“Yo me enamoré de él, me arrimé muchísimo por la falta de afecto que tenía en mi casa, en mi familia. Porque, aunque ellos me amaban, no sabían darme lo que verdaderamente necesitaba. Él (por el argentino) sí: con palabras, bromas, cariño, me dio el afecto que yo buscaba”, agregó la mujer.
Él le dijo: “Vení, yo te espero en Buenos Aires”. Ella reunió a su familia y le avisó:
“Me voy a vivir a Argentina. No hay vuelta atrás”.
Antes de sacar el pasaje, en una conversación con el hombre de aquí, acordaron que lo meor sería que viniera por dos meses para ver cómo iba la relación. Si prosperaba, sí se instalaba definitivamente. Tal es así que en enero llegó a Ezeiza.
Ahí sus sueños comenzaron a desmoronarse. “Le dije lo que sentía, pero a él no le pasa lo mismo. Apenas lo vi le dije lo que sentía, estaba muy feliz de poder hacerlo. Le expresé que tan solo mirándolo se me llenaban los ojos de amor. Y que lo que sentía desde lejos era verdadero y real. Muy fuerte”, contó.
Y siguió con su relato: “Con toda la tranquilidad del mundo me dijo que él no siente eso por mí. Que me ve como una amiga, que siente ternura, pero no amor ni pasión. Y a mí me sucede todo lo contrario”.
“Me llamaba mi amor, me decía que estaba enamorado. Pero ahora que estoy acá me dice todo esto. La verdad es que estoy desesperada, destruida. No sé cómo voy a seguir viviendo”, dijo la mujer, entre lágrimas, al portal mencionado.
“Yo sigo amándolo. Lo único que puedo hacer es tomarle las manos muy fuerte y llorar. Claro que me siento una estúpida, pero lo amo”, indicó.
Ella tiene su pasaje de vuelta a Italia para fines de marzo y no sabe qué hará durante todo este tiempo. “Hubiese querido quedarme mucho más tiempo, pero ahora me siento perdida del todo. En Italia no tengo al amor de mi vida, lo tengo acá, pero ahora dice que no me ama... Siempre le dije que solo quería un día a su lado para darle un abrazo. Y en este momento no tengo nada”, concluyó, destruida.
.jpg)
