Este viernes el Tribunal del juicio por la desaparición de Soledad Olivera realizó la inspección ocular para reconstruir las últimas horas de la joven lavallina. En el procedimiento participaron testigos, abogados de ambas partes y el fiscal de Cámara, quien fundamentó porque pidió que la causa sea calificada como homicidio.
La medida respondió a lo que en derecho se conoce como inmediación del tribunal con la evidencia, y tiene por objetivo que los jueces que deberán dictar sentencia conozcan en primera persona los lugares descritos por los testigos en sus declaraciones.
Primero fueron hasta la finca de la familia Curallanca, donde se presume que se dirigía Soledad el día de su desaparición; y desde allí se reconstruyó en sentido inverso el recorrido que habría realizado la joven la última vez que fue vista por tu familia.
De la inspección ocular también participó el fiscal de Cámara, Dario Tagua, quien fundamentó porque pidió que Mariano Luque sea juzgado por el delito de homicidio y no por privación de la libertad, aunque dijo que entiende la declaración de las hermanas de Soledad, quienes aseguraron que la joven continúa con vida y que fue víctima del negocio de la trata.