Crisis económica en Argentina: crece el cierre de comercios en todo el país y Mendoza no es la excepción. Comerciantes aseguran que la fuerte recesión y la suba de los precios de los servicios públicos resultan lapidarios para el sector. Muchos apelan a la reducción de personal para poder subsistir. Según el CEC, en el último año se perdieron 600 puestos de trabajo.
La calle Rivadavia, 9 de julio y Catamarca son quizás las arterias que muestran la mayor cantidad de locales cerrados.
Las ventanas bajas y los carteles de alquiler son una muestra de cómo está hoy el sector.
Se trata de una situación que se repite en todo el país. En Capital Federal se incremento el número de comercios inactivos, y lo mismo pasa en Córdoba, Santiago de Estero. Los informes de la CAME indican que esto ocurre por las bajas ventas y por las subas de los costos operativos.
En Mendoza, los comerciantes apelan a todo tipo de estrategia antes de cerrar, muchos logran mantenerse en pie, otros en cambio tienen que cerrar.
Según datos del Centro Empleados de Comercios en el 2018 se dieron de baja 600 trabajadores y se redujeron las jornadas de trabajo.
No se toma personal, se despide a los empleados y se apela a fuertes liquidaciones. Ahora con el inicio de la temporada otoño- invierno muchos tienen expectativas de incrementar las ventas, aunque saben que será tarea difícil convencer al cliente por la baja del poder adquisitivo.
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