Los municipios están preocupados por la cantidad de barrios privados en Mendoza y por la necesidad de proteger así la zona de tierras cultivables.
El fenómeno de urbanizaciones cerradas se da principalmente en Guaymallén, Luján y Maipú.
Los barrios privados comenzaron a hacerse visible en los 90. Surgieron ante la necesidad de mayor seguridad y más contacto con la naturaleza, con los años, fueron elegidos como una forma de vida.
En estos momentos, son los municipios los que marcan las reglas de construcción de urbanizaciones con base en el plan de ordenamiento territorial.
Lo que en la década del 90 se podía hacer sin demasiadas normas, hoy al parecer se busca cumplir con un orden que principalmente busque proteger áreas como las cultivadas.
En Guaymallén, por ejemplo, ya no se puede lotear más en zonas como Kilómetro 11, Colonia Molina o La Primavera.
Este fenómeno urbano, que tomó gran relevancia en lugares del mundo, está asociado a múltiples causa, no solo ligados a la seguridad sino a otros beneficios como espacios verdes, servicios incluidos, privacidad. Algunas urbanizaciones tienen hasta clubes y centros comerciales.
En unos de los departamentos más poblados de Mendoza, como es Guaymallén, hay aproximadamente 500 barrios privados. En Luján hay 137 barrios entre privados y semiprivados
Depende de la zona es el valor del metro cuadrado. Hay emprendimientos inmobiliarios que ofrecen terrenos de hasta 2000 metros y otros con dimensión más pequeña.
A diferencia de lo que ocurría décadas atrás, hoy las propuestas tienen un gran heterogeneidad de clases sociales.
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