En un mundo donde las enfermedades infecciosas son tema de preocupación constante, la parasitosis intestinal emerge como una amenaza silenciosa, afectando a personas de todas las edades y estilos de vida en todo el globo. Se trata de una condición causada por la presencia y proliferación de parásitos en el tracto gastrointestinal humano, y aunque puede parecer una problemática limitada a regiones desfavorecidas, su incidencia se extiende mucho más allá de los confines geográficos y socioeconómicos.
La parasitosis intestinal es toda aquella infección causada por la presencia de parásitos en el intestino. Los parásitos son organismos que requieren para su supervivencia permanecer en otra especie; en Medicina, lo llaman huésped y en este caso, son las personas. Según la Organización Mundial de la Salud, este tipo de padecimientos está presente en la quinta parte de la población mundial, pero en la Argentina, en más del 50 por ciento de los niños. Si bien las enfermedades parasitarias afectan a personas de toda edad, la población infantil es la más sensible a sufrirla. Y son los niños quienes pueden experimentar desde malestar general hasta trastornos en su crecimiento y desarrollo intelectual.
Según explicó el médico gastroenterólogo Guillermo Camus "la parasitosis intestinal puede ser ocasionada por diversos tipos de parásitos, incluyendo helmintos (gusanos intestinales) y protozoos, que pueden encontrarse en alimentos y agua contaminados, así como en el suelo y superficies contaminadas. La transmisión suele ocurrir a través de la ingesta de agua o alimentos en mal estado, contacto directo con materia fecal infectada o la penetración de la piel por larvas presentes en el suelo".
-¿Son muchos los que pueden padecer esto y no saberlo?
-Totalmente. Las estadísticas a nivel nacional e internacional hablan de cifras impresionantes a la hora de analizar pacientes infectados, ya que si bien no tiene sintomatología, conlleva una causa de morbilidad muy grande, aunque por suerte de mortalidad escasa. Insisto, el saneamiento ambiental,el maneo del agua, de la fruta, verdura y el suelo entre muchos otros aspectos tienen que ver como causas fundamentales para la transmisión.
-Si bien la mayoría de los pacientes son asintomáticos, ¿Cuáles son los síntomas que pueden aparecer?
Los síntomas de la parasitosis intestinal pueden variar ampliamente, desde leves molestias abdominales y diarrea hasta complicaciones más graves como desnutrición, anemia y retraso en el crecimiento en niños. Sin embargo, en muchos casos, los síntomas pueden ser sutiles o incluso inexistentes, lo que dificulta el diagnóstico. Los métodos de diagnóstico incluyen análisis de heces para detectar la presencia de huevos, quistes o parásitos adultos, así como pruebas serológicas y endoscópicas en algunos casos.
-¿Cómo tratarla y prevenirla?
El tratamiento de la parasitosis intestinal varía según el tipo de parásito y la gravedad de la infección, e incluye el uso de medicamentos antiparasitarios específicos. Además del tratamiento, la prevención desempeña un papel crucial en el control de la enfermedad. Insisto, medidas como el lavado adecuado de manos, el consumo de agua potable y alimentos bien cocidos, y la higiene ambiental son fundamentales para reducir el riesgo de infección.
El profesional estuvo con el equipo de Cada Día, mirá la nota.
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