En Argentina, la tradición de decorar un pino de navidad comenzó en 1807 cuando un irlandés, para recordar la tradición de su país, decoró un pino en una plaza cercana a su hogar.
La decoración varía según las distintas culturas. En Argentina se estilan las bolas de colores, guirnaldas y luces, en China se usan naranjos que significan "Felicidad". Sin embargo, en los países nórdicos, se utilizan ángeles y duendes, mientras que en Japón se estilan los sonajeros y adornos de papel.
Los mendocinos que salieron a buscar ofertas y adornos para su pino de navidad coincidieron en que esos productos están más caros que el año pasado.
Por ello, los ciudadanos eligieron comprar menos productos y destinar el dinero que tienen a otras cuestiones como comprar bebida o comida.