Emiliano Chechi es un mendocino de 19 años que trabajaba como delivery cuando sufrió un brutal accidente.
Fue atropellado por un auto y quedó tendido en el asfalto con la pierna altamente comprometida. En el hospital su mamá, Adriana, tuvo que soportar los peores diagnósticos pero Emiliano continuó luchando.
Un día tuvo que decidir lo que marcaría su futuro: la amputación de su pierna izquierda. "No quería sufrir más", explicó Emiliano quien en caso de negarse corría riesgo de hasta perder la vida y entonces decidió seguir adelante con la amputación.
Se recuperó en el hospital y después decidió seguir adelante. Consiguió un auto adaptado y comenzó a preparar sillones con pallets: "Tomé el ejemplo de mi papá de siempre seguir luchando y nunca aflojar", concluyó Emiliano.