La Mansión Stoppel está ubicada en la calle Emilio Civit y sus muros guardan millones de historias.
Construida en 1912 para albergar al vicecónsul de Chile, Luis Stoppel.
La arquitecta de la dirección de Patrimonio de Mendoza, Graciela Moretti, contextualizó la historia de la Mansión Stoppel.
Chileno de nacimiento y de ascendencia alemana, tuvo una vida muy activa en Mendoza. Su relación con nuestra provincia se divide en dos etapas: la primera que va de 1885 a 1895 y, la segunda, tras vivir varios años en Buenos Aires y luego en Europa, desde 1912 hasta su muerte.
Fue comerciante, terrateniente, político y tuvo una alta inserción en el mundo social de Mendoza de fines de siglo XIX y principios del siglo XX.
La actividad comercial donde se destacó fue en una empresa de carruajes. Entre 1885 y 1895, Stoppel vivió frente a la plaza Cobos (actual plaza San Martín).
A su regreso de Buenos Aires, en 1912, se asienta en su nueva residencia, en Sarmiento 1232 (actual Av. Emilio Civit). A su vez, también poseía un chalet en la Villa Potrerillos y compraba tierras en diferentes zonas céntricas de la ciudad.
En cuanto a su actividad política, fue vicecónsul de Chile, título honorífico producto de su íntima relación con el país trasandino y Mendoza. Prestaba asilo y ayuda a todo ciudadano chileno que se encontraba en nuestra provincia. También fue concejal de la Ciudad.
El actor y escritor Diego Grilli reveló detalles del "fantasma de Luisito" que muchas personas y guardias del museo han declarado haber visto.
Una de las primeras hipótesis es que "Luisito" es un hijo extramatrimonial de Luis Stoppel con una criada.
Otro de las hipótesis es que "el fantasma Luisito" es un chico que habitó en el Patronato que funcionó en el lugar.
¿Quiénes fueron los primeros testigos? ¿Escucharon silbidos? ¿Qué dicen los guardias de seguridad del lugar?