Una mujer australiana se fue de vacaciones a una playa paradisiaca de Tailandia, decidió hacerse un tratamiento de belleza en los pies, agarró una infección y años después le tuvieron que amputar los dedos.
Victoria Curthoys es una australiana de 29 años que se quedó sin todos los dedos de su pie derecho después de contraer una infección en 2010 tras someterse a una pedicura con peces durante sus vacaciones en Tailandia.
Los médicos que la atendieron en Australia tardaron dos años en diagnosticar la infección en relación con los peces "Garra rufa", que son los encargados de llevar a cabo la ictioterapia.
Este tipo de pedicura consiste en que estos animales se alimentan de la piel muerta que recubre los pies haciendo una exfoliación natural.
La chica tenía 17 años cuando se fue de vacaciones a Tailandia y, dos años después, los médicos le tuvieron que amputar el dedo gordo.
Pero el problema, lejos de solucionarse, fue a más. Andar haciendo presión con el dedo gordo, afectó al resto de los dedos.
La joven, que vive en la ciudad de Perth, contó todo en su cuenta de Instagram. "Cuando estaba en Tailandia decidí ir a un spa de peces. No pensé en nada malo cuando vi a que ponían el sistema a funcionar y todo parecía muy limpio, pero estaba muy equivocada", señaló.
Además, Victoria explicó: la infección no le provocó dolores, así que no se dio cuenta del problema hasta que estaba bien avanzado.
"Tuve una infección en todos los huesos de los dedos de los pies. Estaba mal todo el tiempo. Cuando decidieron amputarme los dedos, me sentí aliviada porque iba a volver a mi vida", señaló.
En @terrifically-toeless postea fotos y comentarios, para darles confianza y apoyo a otras personas en situaciones duras como la que pasó ella.