La esposa del recién electo presidente de Francia, Emmanuel Macron, ya está en la historia, no por malgastar el dinero del país como lo hizo María Antonienta, sino por ser 24 años mayor que su esposo.
Brigitte Trogneux fue profesora de Emmanuel cuando él tenía 15 y ella 39, en ese momento tuvieron un romance que terminó en matrimonio.
Cuando conoció a Emmanuel a principios de los años 1990, estaba casada y era madre de tres adolescentes.
Tenía entonces 39 años, era profesora de francés y dirigía un taller de teatro en un instituto de Amiens. Al conocer al futuro presidente, entonces un alumno de 15 años, se sintió “totalmente cautivada” por su inteligencia.
Tras años de idas y venidas, trabas que ambas familias colocaron, Brigitte Trogneux dejó a su marido banquero y se casó en 2007 con Macron, con quien se mudó a París.
Hoy, el actual presidente de Francia tiene 39 y ella 63. Incluso Emmanuel es abuelo ya, pues su mujer tiene siete nietos.
Los más próximos a Macron reconocen la enorme influencia que ejerce Trogneux sobre el presidente y el activo papel que ésta tiene en la toma de decisiones sobre su exposición mediática.
En septiembre de 2016, el Instituto Nacional de Estadística francés estudió la proporción de parejas en las que la mujer es mayor que el hombre. Este estudio permite afirmar que, si bien la pareja Macron no es representativa de la mayoría de parejas francesas, este modelo es cada vez menos raro.
Según los datos, en la década de los 60, dentro de este arquetipo entraban el 10% de las parejas, mientras que en 2012 llegaban al 14%. El mismo año, en el 56% de las parejas, el hombre era mayor que su pareja.
Estos datos muestran las relaciones de fuerza hombre-mujer en nuestra sociedad: cuando la mujer es más joven, "la diferencia de edad es señal de la superioridad del hombre; se podría decir que incluso un indicio de la dominación masculina, en todas las sociedades", explica el sociólogo François de Singly al diario francés Le Monde.
El aumento de las parejas en las que el hombre es menor también es una muestra del "avance en la igualdad de sexos", recuerda Le Monde.
Pero se trata de un pequeño avance, pues las mentalidades necesitan tiempo para evolucionar. Las mujeres que están con hombres más jóvenes enseguida son etiquetadas de "asaltacunas", ya sean Madonna o Demi Moore. O la Primera Dama de Francia.
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