El insólito episodio tuvo lugar en Dixon, Illinois en Estados Unidos, cuando Randy Tompikins se encontró con una situación inusual. Cuando conducía su camioneta, Randy se percató que un coche circulaba por el carril contrario.
La situación llamó la atención de Tompikins que observó lo que pasaba y se dio cuenta de que el conductor del vehículo había perdido el conocimiento tras sufrir convulsiones. Randy no dudó y actuó de inmediato para salvarlo.
En un acto heroico, Tompikins se metió por la ventana del auto y lo frenó. Luego, puso sus dedos en la boca del afectado para que no se trague la lengua. Segundos después llegó la Policía. Afortunadamente nadie resultó herido.
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