Durante Navidad se registraron en Mendoza dos estremecedores casos por balas perdidas que alcanzaron a dos mujeres. Uno de ellos se cobró la vida de la artista Mariana Domínguez, de 28 años, en Godoy Cruz. El otro ocurrió en Maipú.
La segunda mujer herida tiene 60 años y la bala perdida también le pegó en la cabeza, pero afortunadamente se salvó. La víctima estaba en su casa, en la calle Sáenz Peña, en Gutiérrez, Maipú, cuando empezaron a sonar balazos.
Una bala perdida le impactó en el ojo. Inmediatamente, sus familiares la llevaron al Hospital Central, donde la operaron para retirar el proyectil.
La víctima permanece internada y fuera de peligro.
Los festejos de Navidad se vieron completamente empañados en Mendoza cuando una bala perdida alcanzó a un joven de 28 años en Godoy Cruz. Ocurrió cerca de las 2 de la mañana, tras el brindis, cuando Mariana Domínguez se desvaneció sobre la mesa.
Inmediatamente, su familia la llevó al Hospital Del Carmen, donde le descubrieron la bala en la cabeza y quedó internada con muerte. En el transcurso de la tarde murió.
Mariana tenía 28 años, era artista y estudiaba Diseño Gráfico en la Universidad Nacional de Cuyo. Trabajaba como ilustradora Freelancer y estaba comprometida con su novio.
En las redes sociales la despidieron con mucho cariño y afecto, resaltando su calidad de persona.
Minutos antes de las 2 de este 25 de diciembre, en una propiedad ubicada sobre calle Picheuta al 800 de Godoy Cruz, una joven de 28 años se desvaneció sobre la mesa. De inmediato, su familia la trasladó al hospital, donde constataron que una bala pérdida había impactado en la cabeza de Mariana Domínguez.
Según información policial, la joven ingresó inconsciente al Hospital Del Carmen. Los familiares que la trasladaron le contaron al personal médico que se encontraban cenando cuando Mariana se levantó a buscar agua y, en ese preciso momento, se desvaneció, golpeando su cabeza contra el suelo. Comenzó a sangrar por la nariz y los oídos, por lo que la trasladaron de urgencia, dónde le diagnosticaron una herida en la cabeza con arma de fuego.
Debido a la gravedad de la situación, la mujer fue derivada al Hospital Central, donde ingresó a la Unidad de Terapia Intensiva (UTI). El diagnóstico fue de “herida de arma de fuego con orificio de entrada, sin salida, en el occipital izquierdo (parte posterior), quedando el proyectil alojado en el cráneo”.
La investigación quedó a cargo del fiscal de Homicidios, Gustavo Pirrello. Mientras Policía Científica desarrollaba tareas en el lugar del hecho, pudieron detectar un orificio en una tela media sombra ubicada en el patio de la casa, que habría sido provocado por el proyectil que hirió a la joven.