Otra indignante situación de personas quebrando la cuarentena sucedió en Mendoza.
Esta vez en Tunuyán, departamento que volvió al aislamiento más duro por sospechas de contagio comunitario, 15 personas celebraban un cumpleaños, entre ellas 7 menores.
La Policía relató que llegó al lugar, alertados por los vecinos de que en esa vivienda se desarrollaba un cumpleaños con muchas personas.
Una vez en el inmueble, los dueños del lugar discutieron con la Policía tras el pedido de que cesaran la fiesta y que las personas que no vivían allí se fueran a sus respectivos hogares.
Este intercambio de palabras llevó a los policías a detener e imputar a los 8 mayores que estaban en el lugar.
Fueron procesados por el artículo 205 del Código Penal argentino por delito contra la salud pública.