Desde 1994 los talibanes tuvieron el poder en Afganistan tras numerosos ataques en todo el país. Pero no fue hasta 2001 que, tras la intervención de Estados Unidos, el movimiento talibán fue derrocado.
Durante su mandato, las mujeres fueron esclavizadas, al punto de desaparecer del escenario público inclusive. Estas no podían estudiar ni trabajar. Pero gracias a la influencia de Estados Unidos las mujeres gozaron de derechos hasta este año.
Los americanos, con el pasar de los años, fueron reduciendo el número de tropas en Afganistán. En el momento en que quitaron el 90% de las tropas, los talibanes se hicieron con el poder nuevamente.
Los Afganos temen por el futuro del país y la desesperación por escapar se ha cobrado la vida de cientas de personas. Pero sin dudas, las más perjudicadas en esto son las mujeres, quienes temen volver a los años anteriores donde no gozaban de ningún tipo de derecho.
En No Culpes a la Noche, que se emite de martes a viernes a la medianoche y abarcan temas de interés social, no podía quedar afuera este tópico, que tiene puestos los ojos del mundo encima.
Con la participación de Augusto Grilli Fox, periodista analista internacional, contextualizó a la audiencia y los adentró en lo más profundo del conflicto social y político que atraviesa el país Asiático.
Gracias al amplio banquete de información que ofreció Augusto, los televidentes pudieron estar preparados para el importante testimonio que se acercaba en el programa. Nada más ni nada menos que el de una médica que vivió en Afganistán y puede contarnos como es vivir esa situación en carne propia.
Estela Kohn es parte de Médicos sin Fronteras y de la Cruz Roja. Su primer viaje fue en 2002, meses después de que Estados Unidos invadiera el país y colocara sus tropas, posterior al atentado de las torres gemelas.
Estela es ginecóloga y trabajó en un hospital en Kandahar, una de las zonas más conflictivas del país. Ella nos cuenta que allí trabajaban mujeres, pero que depara moverse dentro del hospital se tenían que poner burka.
Debido a su profesión, Estela pudo dar declaraciones sumamente impactantes. Ella afirma que vio numerosos casos de abusos a menores de edad, y de hecho, contó que cuando un hombre toca a una mujer, automáticamente se tiene que casar.
Si una mujer es testigo de una violación no sirve, porque la voz de una mujer es la voz de medio hombre.
Sin dudas, tener el testimonio en primera persona de un caso tan importante como el movimiento talibán en Afganistán, es enriquecedor.
Esto y mucho más se habló en No Culpes a la Noche. Miré el programa completo.
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