En un escándalo sin precendentes con violencia fuera del Congreso Nacional y con insultos y gritos dentro del recinto. Emilio Monzó, presidente de la Cámara de Diputados, luego de que se lo pidiera la diputada nacional por Cambiemos, Elisa Carrió, decidió levantar la sesión en Diputados por la reforma previsional.
Pero antes de ello, hubo casi media hora de insultos, gritos y agresiones dentro del Congreso. La diputada del Movimiento Libres del Sur, Victoria Donda asistió a la sesión con muletas y recordó que Gendarmería y la Policía la reprimió ayer y le dieron un golpe en el tobillo.
Muchos de los diputados de la oposición también estuvieron en enfermería mientras sucedía el principio de debate que hubo en el Congreso Nacional.
Mientras esto pasaba dentro del recinto, en la calle manifestantes de partidos políticos, preferentemente de Izquierda y organizaciones sociales, se enfrentaron con dureza con las fuerzas de seguridad que custodiaban el Congreso.
El oficialismo buscará sancionar este jueves una reforma previsional que modifica los parámetros que se utilizan actualmente para garantizarles aumentos automáticos a los jubilados y pensionados.
La nueva fórmula, que arroja un índice en base al movimiento de la inflación y de los salarios, es cuestionada por la oposición porque los abuelos perderán poder adquisitivo.
El Gobierno, en cambio, asegura que el cálculo permitirá preservar los haberes frente al aumento de precios sin poner en riesgo la sustentabilidad del sistema previsional.
El cálculo actual toma como base la recaudación tributaria y otorga dos aumentos anuales a los jubilados. El esquema que pretende sancionar Cambiemos incluye cuatro actualizaciones en doce meses. La primera, en marzo de 2018, será de 5,7 por ciento.
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