La Peña de Morfi: Impactantes declaraciones de Nahuel Pennisi sobre su ceguera

"El contacto visual lo hace todo", resumió en un frase el músico Nahuel Pennisi en medio de una charla íntima con Jey Mammon, este domingo al mediodía en La Peña de Morfi. 

Ambos artistas, sentados en la mesa compartieron unos minutos a solas. Allí Nahuel habló sobre su ceguera, sobre cómo descubrió el amor por la música y detalló cómo es vivir ciego en un mundo que está hecho para la vista.

Para explicar un poco esto, utilizó una referencia a algo cotidiano que el músico vive. "Estamos acá tomando un cafecito, y de lejos me junan", aclaró Nahuel. "Entonces vienen a querer saludarme a mi pero te dicen a vos, 'Disculpame, lo puedo saludar?', y yo me pregunto, por qué te preguntan a vos, porque yo podría decir, 'che, pero mirá que te escucha'", prosiguió relatando. Y luego agregó, "entendí, igual, después por qué pasa esto. Porque todos nos manejamos con el contacto visual. Lo primero que vos hacés cuando vas a saludar a alguien es mirarlo, o si querés pedir la carta al mozo, o la cuenta, lo tenés que mirar. Esperás que te vea, le haces señas y ahí viene. Obviamente, entiendo que esa parte conmigo, falte y que las personas no estén acostumbradas a eso". 

Antes de todo esto, explicó sobre el padecimiento con el que nació. Un daño irreversible en el nervio óptico que le impidió ver desde que nació. "Lo que me me pasa mi con el tema de la no vista es micro-oftalmia. No me funcionan los nervios ópticos entonces no es sencilla la operación. Y yo siento que eso es muy riesgoso. Pero al mismo tiempo no tengo la necesidad de experimentar ver, porque al nacer ciego mi vida es ésta. No es que extraño ver", le explicó con detalles a Jey en la mesa del programa que creó Gerardo Rozin.

Y prosiguió enfatizando la idea, "pero como yo nunca vi, no extraño ver. No tengo la necesidad de operarme o someterme a algo peligroso sin necesidad", y sintetizó todo en un: "Sería aprender un mundo nuevo. Imaginate no conozco las caras de nadie, los colores de manera visual, todo". 

Si bien Nahuel nació sin la posibilidad de ver, tiene un don único: oído absoluto. Es decir, con solo escuchar un sonido tiene la capacidad de saber qué nota de la escala musical ese sonido ha emitido. Hecho que probó en el programa tocando una taza de las que tenían sobre la mesa. Hecho, que además, dejó impactados a todos.

Y contó una anécdota de niño, “los amigos de mis viejos, que son músicos, me odiaban, porque cuando yo tenía 9 o 10 años, estaba jugando a la bolita o a las escondidas, los escuchaba, iba y les decía: ‘Te equivocaste ahí’. No les perdonaba ninguna”, explicó antes de sentarse al piano con Jey para cantar.