En el juicio que se está realizando por la desaparición de Johana Chacón, ocurrida en 2012, la declaración de una ex compañerita de la menor fue clave para investigar las conductas atroces de Mariano Luque.
La jovencita declaró que el acusado abusaba de ella y que se lo había confesado. Fue así que la Justicia investigó directamente una prenda de vestir de Johana Chacón y confirmó científicamente abuso de Luque para con la menor.
El fiscal, Alejandro Iturbide, fue quien presentó ante los jueces los resultados de la prueba de ADN que complican, aún más, la situación de Luque, acusado por homicidio criminis causa, delito que tiene como única pena la prisión perpetua.
Con esta prueba, se confirma uno de los motivos por el cual Luque habría asesinado a Johana Chacón: evitar que descubran que abusaba de ella.
El otro móvil sería que Johana sabía de su relación con Soledad Olivera otra de las víctimas ultrajadas por Mariano Luque.
Johana Chacón fue vista por última vez el 4 de septiembre de 2012 en la puerta de la finca donde vivía junto a su hermana y Mariano Luque.
En el 2015, Beatriz Chacón cambió su declaración y acusó a su expareja de asesinar a Soledad Olivera y luego matar a Johana para intentar ocultar el otro homicidio.
En junio de 2017, durante un segundo juicio, la Justicia condenó a 12 años de prisión a Mariano Luque por la muerte de Soledad Olivera, desaparecida en noviembre de 2011. La sentencia luego confirmada por la Suprema Corte.
En este nuevo proceso, son querellantes la secretaría de Derechos Humanos y la ONG Xumek.
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