Jey Mammon supo y pudo poner su impronta

Por Marina Correa

Reemplazar a Gerardo Rozín era vestirse con una camisa que podía quedar tan suelta que perdiera su forma o tan ajustada que resultara incómoda. La muerte del querido popularmente conductor y creador de “La Peña del Morfi”, ese programa donde los grandes ídolos de la música y también los que están en camino hacia el reconocimiento confluyen, dejó un enorme signo de pregunta respecto a si podía o no haber un sucesor. Este domingo en el debut de la temporada 2022, salió a la cancha un artista que emergió del under, un artista que había conquistado públicos desde un humor sin filtros tras la máscara de sus personajes. Ese artista, era y es en su esencia un músico, en la apertura del programa, recordó hacía 10 años atrás debutaba en Telefé con “La Pelu” (conducido por Flor de la V), allí los espectadores vieron popularmente su talento musical, y escucharon esa voz limpia y entonada.

“La Peña del Morfi” conducida desde este domingo por Jey Mammon, es una peña que muy probablemente hubiera emocionado a Rozín. Es que Mammon fue un buen anfitrión, hizo que los artistas se sintieran en casa, la principal ocupación y preocupación de Rozín para que esos gigantes musicales se aflojaran, era hacerlos disfrutar sin la incomodidad de las cámaras. Jey Mammon este domingo lo logró, se abrazó con Abel Pintos como quien le da palmadas a un amigo que, además, le hará el aguante y participará de su nuevo disco (el de Mammon sí, no el de Abel). Jey hizo que “Los Palmeras” fluyeran en anécdotas inéditas y Jey dijo que “La Peña del Morfi” era una gran casa de la música, hasta allí quiso llevar su piano personal, el que su abuelo le había cerrado con llave a su papá. Es que la música no era una profesión decía el abuelo de Jey, el padre del nuevo conductor de Morfi, alcanzó a verlo disfrutar con ese piano que pasó años sin sonar. Lo vió en “Los Mammones”, no pudo verlo en “La Peña del Morfi” pero las ausencias fueron presencias musicales y la gente demostró con un gran rating, que dió su aprobación a un conductor que supo y pudo estar a la altura.

Abel cómplice

Uno de los principales invitados que tuvo “La Peña del Morfi” fue Abel Pintos, próximo a brindar 30 funciones en el teatro Ópera en Buenos Aires, el artista fluyó sintiéndose en un lugar ya conocido. Hizo un recital donde siempre emerge su “magia”, pero además fue generoso con el conductor, porque Jey Mammon además pudo palpitar el ritmo de los artistas. Entre Abel y Jey hubo abrazos, risas, el anuncio de la participación de Pintos en el disco lanzamiento que hará Jey Mammon y complicidad. Una complicidad demostrada cuanto hasta se animó a “actuar” Abel Pintos, simulando no estar seguro si haría en vivo y por primera vez con “Los Palmeras” la canción que grabaron juntos “Suave y Elegante”. “Que lo decida el público” decía Abel Pintos y Jey respondía “te encargo el manejo de la televisión de Abel”, que además siguió sosteniendo el personaje de “indeciso”.

Los Palmeras emocionadas

Celebrando los 50 años con la música, “Los Palmeras” le dieron ese toque de alegría que el programa necesitaba, no porque estuviera planchado, eso jamás, sino porque se sentía aún a través la pantalla, que todos necesitaban “aflojar”. El recital de los número 1 de la música tropical, hizo que todo el equipo se pusiera a bailar, incluso la locutora del programa, Eugenia Quibel, última pareja de Rozín. Una voz consolidada en el programa, que también pudo sortear la emoción que la debe haber atravesado todo el programa y apuntaló siempre a Jey. Llegó entonces la participación de Abel con “Los Palmeras”, y se sentía a través de la pantalla, la sensación que el barco llegaría comodísimo a destino.

Equipo consolidado

El exitoso rating del programa, fue consecuencia de un trabajo en equipo, los artistas (este domingo Abel Pintos, Los Palmeras y Los 4 de Córdoba estos últimos también brindando un mega folklorazo televisivo), la producción, el conductor, el rol de Jesica Cirio que se notaba el camino laboral transitado al lado de Rozín. Los comentarios que sumaban, la elegancia que no era moda, sino un blanco que corría el luto, para celebrar la vida como dijo el propio Jey.

“Quiero honrarte Gerardo haciendo tu Peña, estoy muy feliz de estar acá con este equipo que va solo y al que le quiero agradecer. Hacer esta peña es celebrar la vida”, decía Jey con unas palabras más que sentidas. Y Jey lo honró, Jey supo y pudo, las pantallas de la Argentina se encendieron y “La Peña del Morfi” vuelve a vibrar entre música, y gastronomía, entre letras y emoción.